Cómo diría el buen David Robert Jones “No hay nada que aprender del éxito… Todo se aprende del fracaso.
Amigos cómo andan espero se encuentren bien y estén disfrutando de sus motos y rutas que hay en nuestro país, ya casi estamos a la mitad de este 2019 ha sido estupendo lo que hemos vivido en las dos ruedas a este tiempo, hoy les quiero platicar de cómo no logramos llegar a la foto de Acapulco en el famosos Sol a Sol, los amigos de BMW Motorrad México nuevamente tuvieron a bien invitarnos, acompáñenos y descubran como nos fue en el camino.
Antes de comenzar el relato quiero dejar mi postura sobre esta rodada y que para mí lo principal y primordial es rodar desde que salimos de casa, hasta que regresamos, lo que influye rodar de ciudad de origen a Veracruz, de Veracruz a Acapulco y de Acapulco a casa, si OK el entiendo que una parte muy importante del evento es tomarte una foto al amanecer en Veracruz y otra en la costa de Acapulco al atardecer, sin embargo NO comparto que esto tenga que ser primordial o que sea de “a fuerza” este año nos quedamos a unos minutos de estar en esa dichosa foto, tal vez el año que viene lo lograremos.
BMW Motorrad México nos tenía una sorpresa, este año tendremos que rodar más de 1500km arriba de la nueva Scooter C 400X, menuda sorpresa, rodaremos como Dios manda, rodaremos en baja cc.
¡No hay prisa!
En este tipo de rodadas me he acostumbrado a no llevar prisa y al final esto se ha trasladado a otras rodadas, he dejado las prisas para cuando voy solo o con alguien que sé que puede llevar el ritmo, iniciamos rodando temprano cerca de las 05:50 de la mañana de viernes, tendré que pasar por la C400X para después partir al punto de partida, un Starbucks de la Hipódromo/Condesa en dicho lugar ya nos esperamos nuestro amigo Paquito Mendoza de Bike Adventure este día será nuestro guía de ruta, tanto la seguridad como el que nos las pasemos lo mejor posible arriba de las motos correrá a cargo de él y de su valioso equipo (paramédico, chofer, camioneta).
Siendo las 09:02 iniciamos nuestro camino hacia Orizaba Veracruz, el punto a llegar el Palacio de Hierro, la ruta CDMX – Rio Frío – Puebla – Amozoc – Maltrata – Orizaba todo esto por carretera de peaje.
En el primer tramo tuvimos un poco de curvas, de esas que puedes tomar a 125km/hr con mucha seguridad, de esas que solo te preocupa lo que venga detrás y lo que tienes al frente, para mi es la tercera incursión en estas C400X, primera y segunda en cada una de ellas ha sido de menor a mayor y la de este Sol a sol superara por mucho las experiencias anteriores, sin embargo, para mí ya es un poco conocida y esto hace que reaccione y tenga un disfrute mayor.
Puebla es uno de los Estados que me he dado a la tarea de conocer un poco más, es fácil reconocer sus caminos y hacia donde conectan unos de otros, con esa facilidad me encuentro rodando ya a un lado de su estado Cuauhtémoc, es inevitable pensar en “Los cuervos” hecho una pequeña sonrisa y al mismo tiempo acelero, me siento como en mi segunda casa.
Maltrata – Orizaba un pedazo de carretera del que se lee, comenta y habla mucho, accidentes, robos, inseguridad y ahora agrégale varios motociclistas en C400X… Bueno la vida es un riesgo.
Un vídeo corto que ilustra mejor.
Dicen que cuando te la estas pasando bien el tiempo se pasa más rápido, para nosotros iba a ritmo de C400X, ya las 13:52 y estamos en Orizaba, concretamente en el Palacio de Hierro, una impresionante estructura que fue diseñado por el ingeniero francés Gustave Eiffe, durante la época del Porfiriato fue considera la ciudad más culta y educada del país. Un edificio único y excepcional de construcción belga que fue un encargo el Orizabeño Don Sebastián Antonio Duque de Mier y Celis, en fin, les dejo unas fotos que poco le hacen honor a tan bello lugar, visítenlo en cuanto puedan.
La comida como casi siempre ha sido perfecta y digo como casi siempre porque hay un elemento que hace que busques un buen lugar para reposar y esperar a que haga digestión, sé que nos quedan unos 150km para llegar a destino, sin embargo, me está dando sueño y siento cierta pesadez por si fuera poco el calor típico de la zona hace que todo sea un poco más difícil, bueno no hay otra opción más que seguir.
A diferencia del año pasado este tiene otras vicisitudes de un andar más tranquilo, son las 17:37 y ya me encuentro llegando al estacionamiento del hotel, al igual que en la edición 2018 vengo con la clara idea de disfrutar el camino, por ahora terminamos el primer tramo CDMX – Veracruz.
La organización del 2018 tuvo detalles a mejorar, para este año la organización regresa a manos de los que “ya se la sabían” sin embargo hubo detalles que por alguna razón se les fueron de las manos.
Había gente que ya tenía varias horas haciendo fila, algunos de ellos tuvieron que esperar casi al filo de la media noche para obtener su kit, brazalete y demás. ¿Qué es lo que pasaba?
Por lo que me pude percatar, tenían un sistema que leía tu pulsera, hasta este punto todo bien, nada fuera de lo normal el problema era cuando le exigían a su sistema leer muchas pulseras al mismo tiempo, este simplemente no reaccionada y venia el fallo, esto origino que solo se permitiera el acceso de diez en diez, si esto lo multiplicas por 1100 asistentes… bueno ibas a tener que esperar un tiempo considerable, para algunos se llevarían mas tiempo de la fila que en lo que rodaron de la CDMX a Veracruz.
Aunque no nos vimos en el camino, si nos encontramos, mi buen amigo Dave Morales, un buen seguidor de esta página que en más de un evento de BMW me lo he encontrada y cada que nos vemos es un gusto enorme intercambiar palabras, te mando un fuerte abrazo y espero pronto vernos en el camino.
Hubo algunos “abusados” que llegaron sin registro y aun así se metieron a la fila y según generaron caos ¿entonces para qué pides que se registren un mes antes? Esto también afecto a la llegada de Acapulco y el que muchos de los que no terminaron a tiempo el recorrido no lograran recibir chaleco y/o medalla.
Es tiempo de ir a dormir, dentro del trayecto de los 3 días, llegar a Veracruz es el de los más fáciles, el reto como cada año será hacer Veracruz – Acapulco y llegar a la foto de la puesta del sol, dicen los puristas que si esto no sucede bueno, realmente no habrá contado tu ruta, obviamente se equivocan.
Estamos listos capitán!
Tenemos que pararnos temprano como ya es costumbre, noche relajada y perfecta para descansar, nuestro guía de Bike Adventure ya nos espera, el primer punto a parar será la foto oficial, la mañana es nublada y se alcanza ver algo nublada, parece que no tendremos sol que nos el banderazo de salida, conforme pasan los minutos este nos sorprende y hace su aparición.
Sabiendo de los sucesos del año pasado, comenzamos la ruta de forma más consistente, nuestro siguiente punto seria Coatepec Ver, en dicho lugar aprovecharíamos para desayunar, encontrarnos con el buen Rubén y cargar las suficientes pilas como para ya no parar hasta Acapulco.
Cómo es sabido este tipo de paradas conlleva tiempo, no es lo mismo ir 2 o 3 personas y tomar un paso parejo, el grupo está formado por 7 personas más el buen Rubén, salir de los poblados es más complejo, aunque la mayoría rodamos al mismo nivel, el guía por seguridad fija un ritmo y no tenemos permitido pasarlo, son lineamientos que se respetan, sobre todo a la hora de la seguridad, y no es que tengamos un ritmo lento, aunque había momentos en los que podíamos ir más rápido esto al final iba a mermar en el consumo de gasolina.
Vamos llegando a las 09:32 a Coatepec, la mañana es joven pararemos a disfrutar café de la región, Rubén ya nos espera en el “M Cafe Museo/Botica”, es grato ver a la banda en el camino, de este sol a sol sin duda puedo rescatar que el encontrarme con amigos fue lo mejor de la ruta, lo más rescatable, una vez más se cumplía la máxima del sitio “nos vemos en el camino”
13:40 estamos arribando a la capital Poblana, nuevamente el estadio Cuahutémoc me recibe y hace que tenga ese sentimiento de pertinencia, nos dirigimos hacia el periférico para no cometer la equivocación del año pasado, después de este entroncaremos en dirección a la Angelopolis para tomar la autopista a Atlixco, antes de esto nos encontramos con tráfico sobre el periférico, nos asombra ver a un motociclista en el suelo, al parecer otro motociclista lo aventó al estar pasando entre el tráfico, el paramedico que llevamos se detiene a brindar ayuda en lo que llegan las asistencias médicas, revisa y se percata que el motociclista tiene mucho dolor en una de sus manos, no puede sacar el guante así que le indica que tendrá que cortar su guante, este se niega… tiempo después nos enteramos de que perdió uno de sus dedos.
El GPS de nuestro guía lo está mandando hacia Atlixco por la libre, este sin rechistar lo sigue, sin embargo, al ser una ruta ya conocido me percato y paro a 2 de mis compañeros para no seguirlo (habríamos llegado más tarde) ya no pude darle indicaciones a la otra parte del grupo, en lo que lo esperamos para tomar el camino correcto, a lo lejos veo a un hombre mayor, apenas y reconozco su figura, es el buen amigo Abreu, por segunda vez en el día, en mero sol a sol se cumple el “nos vemos en el camino” platicamos un poco, pregunta cómo vamos, como nos sentimos, aprovecho para una foto, seguimos platicando de la ruta y como sentimos la C400X, en fin cuando menos me doy cuenta es hora de despedirnos y seguir con nuestra ruta, que bueno que el GPS genero ese parada fortuita de no haber pasado esto no habría visto a Abreu.
Afortunadamente ya no hay que irnos de Puebla a Cuautla para después tomar a Cuernavaca y entroncar la autopista del sol, hay una extensión de la autopista Siglo XXI que te sacara unos km después de Teques, no tardamos mucho en pasar este tramo, aunque existe un leve problema, no hemos cargado gasolina desde Amozoc Puebla, tenemos autonomía para llegar a Chilpancingo, sin embargo, para lograr esto tendremos que ir a un paso “relajado” es en este momento cuando la tarde se nos va, tenemos hambre, ya nos pega el cansancio de los 42 grados centígrados en algunos tramos de la carretera, paramos a cargar gasolina que lleva nuestra camioneta de apoyo en la caseta de Atenango del Aire, a partir de este punto nuestro gruía autoriza que rompamos formación el siguiente punto de encuentro será en la última gasolinera de Chilpancingo.
3 doritos después me encuentro a 27km de Chilpancingo con mi pantalla TFT en ella un anuncio que pide que pase a la estación de servicio más cercana, de ir a 142km/hr bajo mi paso a 110km/hr sin darme cuentas por momento ya voy rebasando a otros motociclistas, sin darme cuenta regreso a los 142km/hr, quiero llegar, estoy viendo nuevamente un panorama similar al del año pasado, la luz, el sol está cambiando y esto solo significa una cosa.
Uno de los compañeros de prensa se ha pasado de largo y ya está en la caseta, lo malo es que esta en reserva, lo medio bueno es que ya va de regreso, otro compi lleva ya varios km avanzando, tal cual, con el puro olor a gasolina, su computadora a bordo le indicaba CERO km de autonomía, sin embargo llego, seguimos esperando a nuestro compi que se pasó de largo, es en este punto donde sé que no llegaremos, otra parte de mi me pide que tenga esperanza, tal vez lleguemos derrapando pero llegaremos, seguimos esperando, paso a comprar algo para calmar la sed, al terminar el compi que paso de largo ya está cargando gasolina, para este último tramo vamos todos juntos, por momentos rompo la formación tratando de acelerar el paso, dejan que me aleje, bajo mi velocidad y se me pegan, dejo pasar y seguimos a buen paso.
Ya estamos aquí son las 19:37 de la noche, por alguna razón no nos dejan pasar, piden que nos identifiquemos y mostremos nuestros brazaletes, después de unos minutos nos dejan pasar, ahora hay que buscar donde dejar las motos, BMW Motorrad mando hacer unas letras, Edgar y yo vamos a buscarlas, las encontramos y prácticamente dejamos las motos donde el año pasado, vamos a un salón (el del año pasado) está cerrado, no hay gente, el lobby que da a esa entrada también se encuentra solo, no hay algún señalamiento que indique “entrega de medallas, registro, etc aquí” tienes que ir preguntado para darte cuenta que mínimo tendrás que caminas medio kilómetro para recibir tu medalla y chaleco, estamos cansados del camino, el último tramo arriba de las C400X fue sumamente rápido, pero demando más de nosotros, no hemos comido desde las 10 de la mañana, sabemos que ya no es necesario buscar la foto de la playa… minutos después me entero de que solo a los motociclistas que llegaran “en tiempo y forma” recibieron medalla, chaleco y pudieron tomarse la foto” los que llegamos tarde esos ya no contamos, gracias por participar, suerte para la próxima, hasta un proveedor se quedó mirando solamente…
¿Y mi registro no aseguraba mi medalla y chaleco?
Nadie me pudo dar respuesta a esto, en mi caso era un invitado por BMW Motorrad México, pero que tal que hubiera pagado y por la razón que ustedes quieran hubiera llegado igual de tarde, y que después de lo que sea que allá pasado me digan “es que no llegaste a tiempo” Si puedo hacer fila por más de 3 hrs, si puedo permitir que los registros este bajo un sistema el cual queda chico ante tanto participante, si puedo permitir todo eso, pero no puedo permitirme llegar tarde, me quedo con toda la experiencia de viajar de un puerto a otro, de vivir cada km y apropiarme de él, me quedo con los excelentes compañeros de ruta que me han acompañado a lo largo de este viaje, me quedo con las fotos y videos logrados, me quedo con la cara de satisfacción de todas esas personas que vivimos y sentimos lo mismo al ver una moto, ya no hablo de una BMW, hablo de una moto, de esos vehículos con 2 ruedas, me quedo con ser parte de una experiencia que pocas marcas y moto clubs logran, me quedo con toda esta experiencia, no sé si el próximo año este viviendo esto, si es así tengan por seguro que mi primer objetivo será vivir la rodada, si uno de los objetivos de esto que llamamos “De sol a sol” es tomarte una foto en Veracruz (amanecer) y otra en Acapulco (atardecer) tengo algo pendiente, pero este pendiente no me quita la sonrisa de oreja a oreja que me provoca recordar, ver las fotos y escribir estas líneas, tarde o temprano algún día lo lograre (tener ambas fotos) aunque para mí no es lo más importante.
Para casa no hay burro flojo, pero ya estoy algo cansado
Tomo una mala decisión no pienso llevar puesta la faja, después de 200km descubro que esto no fue una buena idea, la espalda baja me duele, parece que el cansancio de los días anteriores apenas ha llegado a todo mi cuerpo, por si fuera poco, el calor viene haciendo que me duerma, busco ir un poco más rápido, no puedo, así que voy cantando como cierto amigo de Tijuana, no me quiero dormir.
En Chilpancingo paramos a cargar gasolina, tomar algo de agua y unos cacahuates para saciar el hambre, que por cierto desayunamos muy bien antes de salir.
Lo que me agrada de estas rutas es que de momento todo puede cambiar ¿nos vamos por libre? Pues vámonos por libre, es el tramo de Chilpancingo a Puente de Ixtla, buen asfalto, poco tráfico y las C400X sacando un espirito deportivo quien sabe de dónde, vamos a buen paso, disfrutando cada km, la última vez que pase por aquí con otro grupo de prensa estos me dejaron, hoy voy casi a la cabeza, cada uno de nosotros trae un tipo de rodar diferente, me estoy acoplando a los más rápidos, procuro ir aprendiendo, de pronto en mis espejos veo a Edgar, me siento cómodo rodando con él, puedo ver como inclina la moto, siento que lo voy atrasando, procuro ir un poco más rápido, una que otra curva intenta ganarme, es indicativo de que estoy superando mis limites, será mejor bajar el ritmo.
La diversión quedo atrás, es tiempo de pasar el último tramo uno de los más difíciles, pasaremos por Morelos y la famosa “pera” al ser domingo me preocupa encontrarnos con todos eso pilotos de GP que asisten a tres marías y con todas las familias que regresan del fin de semana a la CDMX, por fortuna encontramos muy poco de los primeros, muchos de ellos vienen de Acapulco por lo que traen un paso similar al de nosotros, los segundo van en lo suyo, supongo preocupándose por todos los motociclistas, sin importar si van en C400X o en R1, son lo mismo para ellos.
Trafico y más tráfico por fortuna vamos en Scooter y estas no están sujetas a quedarse estáticas, llegamos la caseta de Tlalpan, la entrada SUR de la CDMX, aprovechamos para romper la formación del grupo, yo tendré que ir hacia Santa Fe, sin aviso y como hace un año la ciudad nos recibe con una fuerte lluvia, paramos a poner impermeables (mis compis) yo como sea disfruto mojarme.
Es correcto, me preocupa no ver una coladera cubierta por el agua, o un pavimento poco lavado y con una ligera capa de aceite y demás cosas, procuro ir muy atento, nuestro guía Francisco aun nos acompaña, nos despedirá a la altura de Santa Fe, vamos por calles que no ubico del todo, hasta que de pronto, salimos por una avenida conocida y ahora si todo es más claro, llegamos al punto de partida y esto casi termina.
Pasamos a dejar las motos, si bien mi primer objetivo ya se había cumplido me restaba el más importante, regresa a casa, entero, con bien y feliz, cambiaría de montura, por fortuna solo me restan 55km a casa, el trayecto a Toluca está muy calmado muy pocos autos en dirección a casa, sé que son pocos km y esto hace que imprima mayor cuidado y atención a los detalles, siempre procuro no bajar la guardia cuando estoy muy cerca de casa, por estadística es cuando más nos confiamos y esto puede llevarnos a un accidente.
No me queda más que agradecer a BMW Motorrad México por la oportunidad de manejar la C400X, de hacernos parte de este de Sol A Sol 2019, se vivieron muchas cosas (tramos de explicar unas en esta entrada) otras tantas simplemente quedaran en recuerdo, algunas fueron buenas, otras malas, algunas más excelentes, vicisitudes del camino, al final del día lo importante se logró, después de todo solo estamos “haciendo de esta vida un gran paseo”
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