Relato escrito por Pedro Escobar:
Hace unas horas terminó la transmisión de una edición más del Super Bowl. Entre todas los juegos de campeonato de la NFL que he visto pot TV, hay uno que recuerdo especialmente: la edición de 1995 que disputaron los Cargadores de San Diego y los 49ers de San Francisco.
La razón por la que recuerdo el Superbowl XXIX no tiene que ver con una cuestión de aficiones, sino porque ese día me desbaraté la rodilla mientras pedaleaba mi bicicleta de montaña y caí mal después de un imprudente salto. Recuerdo que esa tarde terminé viendo el juego con mi pierna extendida con una bolsa de hielo y una inflamación del tamaño de un melón en la rodilla.
Hoy, 15 años después, me pasó algo similar. La diferencia es que en lugar de una bicicleta, el vehículo que involucra mi accidente es una motocicleta. Afortunadamente, los saldos del percance no fueron tan dramáticos como en aquella ocasión.
Pero primero, póngase en contexto.
Desde hace tiempo tenía ganas de escribir una entrada en mi abandonado blog y pensé que una rodada sería buen pretexto para volver a escribir. El sábado hubo muy buen clima, por lo que decidí rodar al vecino municipio de Villa del Carbón para buscar en sus tiendas peleteras un par de guantes, comprar un poco de queso fresco y hacerme una fotos aprovechando los estupendos paisajes boscosos de esta parte del Estado de México.
zSalí de Cuautitlán Izcalli al medio día. El sol brillaba muchísimo, pero no hacía calor gracias a un viento helado que despejó el cielo y reguló la temperatura. Salí con muy buen ánimo escuchando unas buenas rolas de Iron Maiden, AC-DC y Guns N’ Roses en mi Ipod, que incluso me hicieron cantar un rato protegido por el anonimato de mi casco.
Pasé Tepotzotlán a buen ritmo y llegué a San Francisco Magú y San José del Vidrio rebasando autos en los topes. Después, mi velocidad cambió un poco al llegar al entronque de la carretera Nicolás Romero – Villa del Carbón, ahí encontré un tráfico cargado debido a las paradas continuas de los autobuses de pasajeros .
Después de pasar Cahuacán, aceleré en unas largas rectas en donde es posible tomar una velocidad de entre 90 – 100 km/hr. Del lado derecho de la carretera, -en dirección a Villa del Carbón- hay un vaso regulador que se alimenta del agua de temporal que baja de los cerros, en ese lugar se ofrece comida y es posible rentar lanchas y caballos por alrededor de $40 la media hora. Después, comienza una zona de ascenso justo antes de las complicadas curvas en bajada que llevan a Villa.
Y entonces sucedió. Después de alcanzar la cima del cerro en el que comienzan las zona de descenso, recuerdo venir circulando detrás de varios automóviles y un molesto camión que retrasaba el paso. Circulabamos a velocidad crucero de 50 km/hr cuando antes de una cerradísima curva, el estúpido camión frenó demasiado rápido.
Traté de frenar con el pedal de la llanta trasera, pero en cuestión de segundos ví que no sería suficiente y metí de golpe el delantero. No podría describir fielmente lo que pasó después, solo recuerdo que perdí el equilibrio de la moto e instintivamente trate de mantenerme sobre las dos llantas primero con un pie, luego con el otro, pero las llantas se habían bloqueado y la velocidad era demasiada de modo que caí al suelo. Afortunadamente el camión avanzó y caí derribado dentro de mi carríl, pues la carretera federal es una vía de únicamente dos carriles.
Dos segundos después me ví en el suelo, volcado del costado izquierdo y con la moto aprisionando mi pierna izquierda. Lo primero que pensé fue voltear hacia atrás, providencialmente el auto que venía atrás ya se había detenido, así que traté de incorporarme, pero tuve que batallar por lo pesado de la moto. Al segundo intento logré liberar mi pierna y de inmediato traté de levantar la Enticer, pero no tuve éxito hasta que el conductor de una camioneta que venía en el carril contrario se paró a ayudarme, me preguntó si estaba bien y siguió su camino.
Ya de pie y con la moto sobre sus dos ruedas, llegó corriendo otra persona que portaba sombrero Tejano a auxiliarme. Varias veces me preguntó si estaba bien y yo respondí que si, le comenté que me había ayudado muchísimo la chamarra de seguridad. “Solo te faltaron los guantes, sino no te hubiera pasado nada” – me comentó. En ese momento me dí cuenta que mi mano izquierda tenía un gran raspón.
Tardé un poco en regresar del shock de haberme caido. Incluso no lograba encender mi moto, intenté varias veces presionar la marcha sin darme cuenta que había cerrado el switch de arranque con la llave. Después de encender el motor, agradecí al hombre, -que había corrido desde unos locales de comida cercanos a la curva en la que me caí- su ayuda. La persona volvió por donde vino después de darme una palmada el hombro, me despedí de él y emprendí la marcha.
Lógicamente, recorrí el resto del trayecto a una velocidad varias veces menor a la que había circulado antes de caerme. Después de tomar las peligrosas curvas de bajada que anteceden a la entrada de Villa me detuve en la gasolinera para lavar mis heridas y hacer un recuento de los daños. Cuando bajé de la moto me dí cuenta que también me dolía la rodilla izquierda y el antebrazo derecho.
Pese a que mi chamarra de seguridad lucía sin daño, cuando me despojé de las dos chamarras que portaba pude ver un amplio raspón en mi antebrazo izquierdo y uno más pequeño en mi rodilla. En cuanto a la Black Beauty no hubo grandes daños que lamentar salvo un par de raspones en el poza-piés y en la tapa del cárter. Afortunadamente, la nobleza de la Enticer 125 YBA hizo que mi pérdida de la virginidad en materia de accidentes en el motociclismo fuera menos traumática. Snif!
Llegué a Villa del Carbón con los nervios crispados. Me tranquilizé buscando mis guantes. Después de husmear en un dos locales encontré un par a mi gusto en una tienda peletera al amigable precio de $135. Después compré una pieza de queso fresco y un poco de requesón casero por $50. Luego de tomar un refresco, llamar a mi novia para contarle mi accidente y mandarle un SMS al Almighty con el mismo asunto, decidí emprender el regreso a un paso mucho más calmado.
Varias veces me paré a hacerme algunas fotos.
Primero en el altar a la Virgen de Guadalupe en la entrada de Villa, después en la curva donde me caí, luego en el vaso regulador que antes mencioné, y finalmente en lo alto de una colina desde donde se apreciaba una magnífica vista de los volcanes gracias a la claridad del día. Eso me tranquilizó un poco para llegar a Izcalli un poco más sereno y buscar un antinflamatorio y el excelente antibiótico de la solución Microdacyn, que de verdad, vale los $135 que cuesta a la hora de desinfectar y acelerar la oxidación (cauterización) de las heridas cutáneas.
¿Qué enseñanzas me dejó la caida de la moto?
Que nunca hay que fiarse de los traicioneros camiones de pasajeros.
Que siempre es mejor hacerse a un lado cuando el auto de atrás te viene presionando.
Que la inversión en el equipo de seguridad nunca será excesiva: Casco, chamarra de seguridad, botas, guantes y si es posible, pantalón con protecciones son implementos obligados por más breve que sea la rodada.
Que a veces subestimo la buena voluntad de las personas. Además de los dos hombres que llegaron a mi auxilio, varios automovilistas que venían detrás se detuvieron para preguntarme cómo estaba y si necesitaba ayuda.
Que es genial poder volver a escribir: “Nos vemos en el camino” después de esta experiencia, en que la vi tan cerca.
Hace unas horas terminó la transmisión de una edición más del Super Bowl. Entre todas los juegos de campeonato de la NFL que he visto pot TV, hay uno que recuerdo especialmente: la edición de 1995 que disputaron los Cargadores de San Diego y los 49ers de San Francisco.
La razón por la que recuerdo el Superbowl XXIX no tiene que ver con una cuestión de aficiones, sino porque ese día me desbaraté la rodilla mientras pedaleaba mi bicicleta de montaña y caí mal después de un imprudente salto. Recuerdo que esa tarde terminé viendo el juego con mi pierna extendida con una bolsa de hielo y una inflamación del tamaño de un melón en la rodilla.
Hoy, 15 años después, me pasó algo similar. La diferencia es que en lugar de una bicicleta, el vehículo que involucra mi accidente es una motocicleta. Afortunadamente, los saldos del percance no fueron tan dramáticos como en aquella ocasión.
Pero primero, póngase en contexto.
Desde hace tiempo tenía ganas de escribir una entrada en mi abandonado blog y pensé que una rodada sería buen pretexto para volver a escribir. El sábado hubo muy buen clima, por lo que decidí rodar al vecino municipio de Villa del Carbón para buscar en sus tiendas peleteras un par de guantes, comprar un poco de queso fresco y hacerme una fotos aprovechando los estupendos paisajes boscosos de esta parte del Estado de México.
Salí de Cuautitlán Izcalli al medio día. El sol brillaba muchísimo, pero no hacía calor gracias a un viento helado que despejó el cielo y reguló la temperatura. Salí con muy buen ánimo escuchando unas buenas rolas de Iron Maiden, AC-DC y Guns N’ Roses en mi Ipod, que incluso me hicieron cantar un rato protegido por el anonimato de mi casco.
Pasé Tepotzotlán a buen ritmo y llegué a San Francisco Magú y San José del Vidrio rebasando autos en los topes. Después, mi velocidad cambió un poco al llegar al entronque de la carretera Nicolás Romero – Villa del Carbón, ahí encontré un tráfico cargado debido a las paradas continuas de los autobuses de pasajeros .
¡Primis!
¿Vas a poner tu calaverita?, aunque tu ya la traes en tu mochila jajaja
Lo de la calaverita lo supe porque un fotógrafo hizo una foto al respecto a unos “Seuz”.
Me imagino eso que sentiste, el verte “librado” o pensar que algo peor pudo pasar, pero lo mejor de todo es una de tus enseñanzas, puedes escribir: “nos vemos en el camino”
¡Anda que más kilómetros te esperan!
Por cierto… ¡Hola Pedro!
Hola Tere! Gracias por tus comentarios.
Lo primero que sientes es un shock que neutraliza todo dolor que puedas sentir y un instinto de supervivencia que te hace buscar la orilla de inmediato.
Por desgracia, en mi caso me tardé un poc en levantarme porque la moto aprisionó mi pierna.
Después te enfrentas a volver atreparte al caballo bronco con una inseguridad y falta de confianza similar a la que deben sentir los futbolistas que fallan un penal.
Pero afortunadamente aqui andamos. Prudencia y manejo defensivo es la enseñanza que me deja esta accidentada rodada.
Pedro, eres un joven muy pinche ocupado, desde octubre que no podemos rodar, aun tengo en la mente la charla que mantuvimos por el MSN, donde este fin tu podías salir y que con mucho gusto me invitaste, pero por otras cuestiones NO pude, NO lamento no haberte acompañado, son cosas a las que nos exponemos, es importante aprender de NUESTROS ERRORES.
A pesar de que no lo mencionas, creo que ibas muy pegado al auto inmediato a ti eso demuestra para todos que hay que guardar nuestra distancia para no tener hacer un frenado de pánico donde de la nada TODO MUNDO SE FRENE y te tome por sorpresa.
Pedro me da gusto que solo estés con raspones, hematomas e inflamaciones, seguro es que esto te pondrá en otro nivel.
Recuerdo como me decías y me hacías insistencia de que diéramos una rodada “corta” a como lo veo creo que NO importa si es larga o corta la rodada, si está ahí latente el que suframos un accidente así será, con esto te digo que vamos a rodar más lejos, anímate, mucho ánimo y vámonos con los que sigue.
“ARRIBA Y ADELANTE”
“Solo triunfa en el mundo quien se levanta y busca a las circunstancias, creándolas si no las encuentra.”
George Bernard Shaw
Estoy de acuerdo, es vital guardar la distancia adecuada, pero más aún anticipar los movimientos del carro de adelante, tratando de ver lo que hacen dos o tres carros más adelante…
Super DrNeon a.k.a. Pedrinuro de Mexico!
QUe bueno saber de tus rodadas, lamentable lo de tu accidente, pero que se puede hacer sino aprender de eso!
Que bueno que no pasa de raspones y que los demas conductores se ofrecieron en ayudarte o al menos en preguntar si estabas bien, que en mis adentros me pregunto si uno en esos momentos llegara a decir otra cosa :-S
Hay veces donde me pregunto si tanta parafernaria que me pongo sera demasiado, y pues me falta protejerme mis naves y la quijada jejeje, tal vez podras platicarnos mas como fue tu caida, a lo que entendi es que la llanta delantera se patino y te caiste de lado.
EN fin, bueno saber de ti, y si, han estado hermosos los dias por aca, y segun iva a seguir lloviendo jejeje
Un saludo Peter y que esos raspones sanen pronto!
Saludos a la Black Beauty! 😉
Carambas, ya ingresaste al Club que no tiene NADA de exclusivo, pues es rarísimo el motociclista que NO se ha caído. 🙁
Por fortuna, los daños físico fueron leves y pronto te recuperarás totalmente.
Solo me queda secundar al Gran Almighty en lo de la precaución de no ir muy pegado a la lata delantera.
A propósito:
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MENSAJE AL ALMIGHTY
¿COMO QUE RELATO ESCRITO POR EL ALMIGHTY?HAY QUE MODIFICAR LA ACREDITACIÓN*****
Bueno, mi estimado Dr Neon, autorecétate una pomada milagrosa, descansa, y ¡A RODAR!
Saludos desde Reynosa.
macnifico
…
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Listo Macnifique…. YA quedo…
Muchísimas gracias a todos por sus comments muchachos.
En realidad no se como describir la caida de manera cabal. Solo se que la moto comenzó a serpentear al tratar de frenar y al bajar los pies por instinto fuecuando todo valió gorro.
Los consejos del Almighty son ciertos, hay que darle distancia a los coches y no tratar de rebasar al menos que se cuente con todas las garantías de que la maniobra tendrá éxito.
Un saludo a todos y gracias por el crédito.
Lo único malo de eso es que cuando vas en una fila, NUNCA FALTA un “desesperado” que intenta rebasar “a lo loco” y se mete a la fuerza en el espacio que dejas como “colchón”. Hay casos en los que simplemente NO se puede ganar. 🙁
Saludos desde Reynosa.
macnifico
…
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Tienes toda la razón es muy cierto que ven un espacio y tomala cuando menos ves ahi se estan metiendo, pero YO creo que si ya se te metieron ni modo Nuevamente dejas tu espacio adecuado para frenar sin problemas.
Como van esos papeles de legal?
Mi buen Mac vas a tener que hacer un post de esa onda legalizar, importar, emplacar, pues o como? cual es el verdadero problema de tu BurgMac por que tengo intención de ir por una CBR por esos lados, pero si va a salir mas caro el caldo pues mejor aquí… por favor explicate mejor jeje.
¡Buena idea! Que tal si algún día me decido a comprar una KLR 650 y no me queda más que traerla de allá… La verdad no se nada de legalizar,nacionalizar, que si título limpio, salvaje, pedimento de importación, etc…
“Que es genial poder volver a escribir: “Nos vemos en el camino” después de esta experiencia, en que la vi tan cerca.”: ¡esa es la actitud!
Me enteré de tu caída minutos antes de que fuera publicada, me lo comentó Almighty. Primero no me dió detalles y por un momento pensé que había sido algo grave, tampoco me dijo quien había caído. Luego me tranquilicé pues ya que de haber sido algo grave me hubiese dicho inmediatamente. Me da gusto saber que los daños que sufriste no fueron tan graves. Se demuestra que el equipo de protección sirve, ya que por ejemplo la raspada en el brazo hubiese sido más grande sin tu chamarra.
Se que ahora no tiene caso decirlo, pero me da la impresión de que luego del accidente reiniciaste tu marcha rápidamente. Creo que cuando nos pase algo así a cualquiera es necesario revisar los daños en nosotros mismos y en la moto con calma, al tiempo que nos tranquilizamos, ya que pueden haber daños ocultos en frenos, suspensiones que se atoran, etc. que podrían generar un nuevo accidente…
Me da gusto verte rodar de nuevo Pedro, aunque lástima por el accidente, pero si lo ves del lado positivo te ha dejado y nos ha dejado algunas enseñanzas muy útiles…
Sigue rodando y ¡Nos vemos en el camino!, seguro que si…
Mi buen Pedro te acaba de bautizar el asfalto, lo bueno es que salio barato y estas bien, tanto rato sin tener noticias y pues desgraciadamente no son del todo buenas,dicen por hay que los unicos que no se caen de las motos son los que no se suben 🙁
lo bueno es que como bien dices mas vale traer equipo, yo te recomendaria integrar unas rodilleras y si tu chamarra no tiene proteciones rigidas tammbien unas coderas, puedes conseguir el par desde 500 pesos y minimo usarlas al salir a carretera.
Una recomendacion y no solo lo digo por experiencia propia, cuando veas que el choque o caida es inminente abandona el “barco” mas vale caer lo mas lejos de la moto, su peso sumado a la velocidad te puede romper las piernas o como en tu caso al quedar con la moto sobre de ti,el escape puede provocarte quemaduras.
Espero algun dia verde en el camino mientras tanto recuperese pronto.
No la chifles que es cantada Motoso, ahora si tu mismo te pones pa una desvirtuada… como que los que no nos caemos aun, no nos subimos a la moto visita este blog http://gn125h.wordpress.com es más no tan lejos aqui en Motoruta te puedes dar color de eso… PUES QUE PASO… MOTOSO… NTS SOY PAYASO.
Haber Admin, no sabes que es una metafora, pista es algo asi como las canciones desvirtuadas de tus post. osea un juego de palabras 😀
no quiere decir que los motociclistas tengamos que estar besando el suelo a cada rato.
pero eso si a todos tarde o temprano nos toca, yo ya llevo cinco percanses en moto, afortunadamente a la Suzu y a la Sra no les a tocado la suerte de mi fiel Biz, que era la que se la pasaba azotando.
Se dice por ahi que en el mundo existen dos tipos de motociclistas, los que ya cayeron, y los que van a caer. Bienvenido al club, aunque no lo creas tu mente, tu inconciente ya se nutrio con un poquito mas de experiencia, de conocimiento, de ese “no se que” que los mantendra a salvo a ti y a tu caballo de acero. Una demostración mas de que Dios tambien “rueda”, porque estas bien, gracias a El. Saludos y nos vemos en el camino.
Aviso a la raza:
Ya nacionalicé a la BurgMac, y mañana me voy a sacarle placas. Dependiendo de cuanto $$ me quede, veré lo del seguro. Si no, pues la próxima semana arreglo eso…
Así que para mañana en la noche o pasado mañana busquen el post de la nacionalizada.
(Anuncio político pagado por el propio candidato).
Bueno, ya desvirtué, les regreso a los comentarios.
Saludos desde Reynosa.
macnifico
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¡Que bien! Por cierto, ¿con que compañía asegurarás tu moto? Alguna vez fui a preguntar a Mapfre y me mandaron por un tubo, me dijeron que solamente aseguraban flotillas… Sin investigar ni más, de entrada me descartaron jaja
mmmmm Flotillas? mmmm a ver
Motoso Racer Team 2 Motos, el Aarón su DR, el Pistolero una T100, Tocarranch su shadow, Pier de Mexico la Yamaha, el buen edgar 2 motos, el octavio su Avenger, la pulsar, Trigger… mmm a ver voy por la calculadora.
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chin dale “c”……………….
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…. Listo…No pos son como 11 mas la Burgmac con queso. pos 12… disculpe Joven con cuantas motos se hace una flotilla?
Mañana averiguo el nombre de la Aseguradora… Es a traves de una Cooperativa de la que soy miembro. ¡Ah, pero no me aseguraron que pase! Quesque mandarían los papeles a México y que allá deciden. Y que tengo que tener seguro de vida extra. Por fortuna tengo 3, el de Pemex, el del Sindicato y el de la Cooperativa. Así que no hay problema por ahí. El problema es que es moto, y en esta oficina JAMAS han asegurado una moto, y no están seguros de que se pueda.
Así que la idea de la flotilla es buena.
Actualización de las placas: NO HAY. Que vuelva en Marzo… ‘ché gobierno. Les digo, uno quiere andar bien, y le ponen a uno trabas y trabas. 🙁
Saludos desde Reynosa.
macnifico
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Por fortuna no paso a mayores y solo acumulas experiencia para que en la medida de lo posible reduzcas el riesgo de que vuelva a pasar.
Saludos